LOS MIEDOS
Todos alguna vez hemos sentido algún tipo de temor, ya sea por el deseo de lograr ciertas cosas o porque nuestra condición de seres imperfectos nos puede llevar a fallar. La vida está llena de decisiones por tomar y pruebas para medir nuestra entereza. Si no estamos seguros de nosotros mismos, estas situaciones pueden hacer surgir ese sentimiento de miedo, ese temor que hace que dudemos y en ocasiones que nos agobiemos con lo que "puede pasar".
En esos momentos es cuando demostramos que tan fuertes somos, no por el hecho de pretender no sentirlo, ese no es el caso. Nuestra fuerza se refleja cuando vencemos ese miedo y damos el siguiente paso, guiados por lo que creemos, por lo que queremos.
Esos temores no son más que pruebas y no debes sentirte mal al experimentarlos, siéntete mal si te dejas envolver por ellos y dejarte llevar en vez de actuar.
El miedo no es más que una sombra en la pared rodeada de oscuridad, puede parecer imponente, pero si buscas su fuente, te das cuenta que no es tan grande en realidad.
Del santo Evangelio según san Marcos 13, 24-32
Hace 4 días.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario