Cada quien tiene habilidades y gustos diferentes y es sorprendente como pueden darse amistades pese a esas diferencias en los intereses. A mi me gusta mucho la música, disfruto escuchar una buena interpretación en cualquier instrumento, pero jamás aprendí a tocar nada.
En mi casa, mi mamá solía tocar la guitarra y desde chica a mi me gustaba escuchar los discos de Richard Clayderman (piano). Esas melodías tranquilas, tan llenas de paz, que invitan a pensar y que son capaces de traer a la memoria solo buenos momentos, aquellos donde tuvimos un aprendizaje o en los que sentimos que somos los dueños del mundo y que casi cualquier cosa es posible.
Todas esas emociones que venía a mi cada que escuchaba un piano, me animaron a tomar clases para aprender a tocarlo. Desafortunadamente, mi “profesor” era poco serio. Yo iba emocionada a las clases, muy feliz con mi cuaderno pautado y mi lápiz. Mis papás compraron un pequeño teclado para que practicara. Si mal no recuerdo, fui como a 4 o 5 clases y jamás salí del Do Re MI… mi profe se salía del salón y se iba con su novia, el único método para hacerlo regresar era dejar de tocar.
Esta situación terminó por cansarme y dejé las clases de música, yo creo que de haber seguido yo estudiaría otra cosa.
Pero las cosas pasan siempre por una razón, quizá no era el momento para que yo aprendiera, quizá el Eutimio no era el indicado para enseñarme, porque yo nunca vi que se apasionara por algún arte… y se hacía llamar maestro de Artísticas.
Carlitos, espero que tengas mejor suerte que yo, aprovecha esas clases de piano que ahora estás tomando. Yo se que vas a poner tu corazón en esto, tal como lo haces con todo, quizá después puedas ser mi maestro.
Para que me enseñes a ver la vida desde la perspectiva de un músico, a ver las cosas como tu las ves, expresar un sentimiento con una melodía y lograr que el silencio muera sin agonía…
Todas las profesiones tienen gran impacto, pero en esta ocasión… mis respetos a los músicos, para mi son verdaderamente admirables.
Del santo Evangelio según san Marcos 13, 24-32
Hace 4 días.
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