Tengo un pasado muy real y un presente que trato de recuperar para que la sal del futuro la traiga solo las olas del mar.

Y entonces el pasado regresa y el tiempo avanza hacia atras sin detenerse. Darle una actualizada a la vida con lo que hemos aprendido. Todo es cambio, la tierra no para de girar y no se que tanto tiempo debe pasar para determinar si es muy tarde, si una regresión son solo anhelos oníricos o entre sueño y sueño puedo seguir brincando entre las nubes, dejando al vértigo guardado en un cajón. O quizá ese anhelo de caer y saber que alguien abajo estará esperando para amortiguar la caida, tender la mano y decir "Aquí también puedes saltar".
Líneas alternas temporales, escapes de la realidad por otras posibles realidades y la balanza se ha convertido en un péndulo infinito y no se ha detenido, quizá nunca lo haga, y si así fuera, no se si podría mirar. El tiempo nos cambia ya nadie somos exactamente igual y nos pueden sorprender, escuchar lo que siempre deseaste de la persona que menos lo esperabas escuchar.
Es bonito soñar, la vida en si está hecha de sueños que no solo quedan en el aire, la vida mejora con la búsqueda constante de poder hacerlos realidad. Y mis tardes tendrán el toque suave de dejarse llevar, de sentir la brisa en la cara, de probar la sal, la miel y la suavidad de esa superficie. Sin el temor de despertar porque en esos sueños no me iría muy lejos y mis pies apenas si se han separado del suelo. Y sueño y quiero y hago y tengo.
Todo cambia y no se si después de un tiempo quisiera que todo siguiera igual.