Quinceañera
Un sueño hecho realidad, lo que se ha esperado y planeado por tanto tiempo. Ser el centro de atención, lucir como nunca dentro de un vestido nuevo que nunca volverás a usar, la familia feliz de que su niña crece, acompañada de amigos, conocidos invitados y unos cuantos colados.
Una noche en torno al eje quinceañero, total, solo se cumplen 15 años una vez en la vida... Y dentro de la fiesta, el alboroto y demás, llega el bals, con 1, 2, 4.... "n" chambelanes, ellos elegantes, caballerosos, amables, dando brillo a la emocionada festejada.
Padres orgullosos, madres exhaustas, copas llenas, botellas que se vacian, comida, inevitables mensajes emotivos, penas propias y ajenas, alegrías. Todo por una sola noche, todo por sentirse luna llena.
Que horror! a mi nunca me gusto nada de eso... aunque me divertí en las que me invitaron, pero hoy, hay una quinceañera a la que envidio, pero no por todo lo antes mencionado... sino porque ella, al menos por hoy, al menos por unos minutos estará cerca de mi luna llena, viéndole como solo he podido imaginar. Mientras yo a cientos de kilómetros, solo me queda platicar con la luna y pedirle no tener 15 años, no una fiesta, sino uos minutos con esa estrella, fundirme en una canción que nazca del interior.
sábado, agosto 20, 2005
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