sábado, noviembre 29, 2008

SIlencios

Shhh no hay ruido... solo se escuchan las respiraciones y los murmullos entre sueños, ya todos duermen y nadie percibe que mis ojos aún no se pueden cerrar. Un hasta mañana, las luces apagadas, los grillos tomaron vacaciones y juraría que escucho los latidos de mi corazón.

Las voces internas han aprovechado para comenzar a hablar, todas al mismo tiempo que no les entiendo, les pido que guarden silencio, las pueden escuchar y conocer lo que hay en mi interior. Pero no se estan quietas y empiezan a convencer a los dedos que sean sus voceros en silencio, que plasmen todo lo que dicen, pero como hablan todas al mismo tiempo, los dedos han decidido hacer lo que ellos quieren, se pusieron en huelga, pero es tanta la insitencia que a fin de que los dejen ir a dormir y que el silencio se adueñe del lugar para ver si puedo conciliar el sueño, han comenzado a escribir. Algunas palabras sin sentido, pedacitos de canciones, frases en otros idiomas, bla bla bla, güiri güiri... aha , si, no, achis nel...

Se han vuelto locas... escriben tan aprisa que creo que no tienen la más remota idea de lo que están poniendo, quizá el exceso de cafeina las ha alterado, pero el teclado genera un ruidito y lo que requeiro es silencio. Pero al parecer las voces se van descargando, se han ido quedando sin fuerzas o de plano el cerebro las ha bloqueado...

Unos minutos de paz, creo que aprovecharé para dormir, porque hay cosas que no esperan y muy a mi pesar en un rato más tendré que estar arriba y completamente conciente... jajajaja como si se pudiera, pero ok... aprovecho el silencio para intentar dormir... en un rato más comenzaré un nuevo dia.

sábado, noviembre 22, 2008

Hoy hace frio...

Hoy amaneció haciendo más frío que otros días y no fue solo mi imaginación o las ganas de seguir en la cama. Era algo así como una invitación de la cama de permanecer en ella, dándome argumentos verdaderamente convincentes para que me quedara en ella. Ella es más calientita y yo soy friolenta de más [un punto a su favor], mi cama es cómoda, suavecita, uno descansa muy rico en ella [dos puntos…], hoy por fin es viernes, casi fin de semana [no tan convincente pero van 3-0], puedo volver a soñar eso que tanto me gusta y quizá hoy si me deje recordarlo y tenerlo presente todo el día [mmm… un punto más que vale por como 3, llevamos 6]. Y el despertador vuelve a sonar invitando a pensarlo bien, me da una segunda oportunidad de reconsiderarlo, pero con un botón vuelve el silencio, la cama sigue con su labor persuasiva, casi creo que la almohada es quien me abraza y no al revés [otro punto más].


Vaya que si me empieza a convencer, uno se hace a la idea de que si uno fuera niño, mamá tendría consideración de uno y diría “Ay pobrecita mi niña, hoy hace mucho frío, ahí sigue”, mi memoria se remonta a mi niñez y siempre ahí mi mamá… el despertador por tercer vez y mi mamá tan presente en la memoria, con sus palabras diciéndome “Arriba, si hace frio, pues te abrigas, pero tu tienes que ir, si te regresan es diferente, pero tu cumpliste” [20 puntos para mi mamá y la balanza se inclina a su favor por 14].


Por fin me levanto, no puedo permanecer más ahí, la conciencia no me dejaría, me visto, me abrigo, recuerdo las veces que incluso con temperatura, llena de granitos por varicela, rubeola, casi sarampión, dengue y escarlatina [combinación de enfermedades, todas al mismo tiempo], mi mamá me llevó a la escuela. Por supuesto me regresaron a la casa y los médicos me pusieron en cuarentena. Recuerdo lo divertido que era ver a mi hermanita que apenas si se podía mover y a la salida de la escuela hacíamos recuento de cantidad de empalmes que le había puesto mi mamá. Y ella solo sonreía y nos decía “Pero no se enferman verdad”. Ah que mi madre, con tan pocas palabras te tumba tantos argumentos.


Hoy hace frío, mucho más que otros días, hoy tardé en levantar, pero por fin estoy acá, con manos, nariz, orejas y mejillas heladas. Alguien me dijo “Cual frío?” al ver como me abrigue, le tiendo la mano y me dice “Estas helada”. Solo sonrío y sigo mi camino. Si, hoy hace frío, la cama no me convenció, podrá ser que mis manos estén frías, pero también se que todo esto es temporal y unos guantes no son la solución, es una mucho mejor condición.


Por lo pronto, voy por un café.

viernes, noviembre 21, 2008

Gracias Frank

No se que es lo que tiene el Frank que hago cosas que no suelo hacer comunmente, hace días o semanas él me otorgó un premio en su page y pues la vdd los agradezco, pero eso de la presunción no va conmigo, pero hoy tengo ganas de pecar de vanidosa y pues aquí lo agradezco publicamente y pues como dicen quiero ofrecerlo a mis 4 blogger favoritos (sin contar al buen Frank).

* Carla
* Trovator
* Jesús Tzu
* Sakura

Así que chicos. I love your blog (bien bilingüe pues)

Y pues siempre ponen reglas, pero como se hicieron para romperse solo les digo que:

* Gracias al buen de Frank y su blog "La vida según el Italiano, Blackeagle"

*Aquí les dejo 6 cosas que a mi me hacen feliz aunque a los demás no.

1) Escribir y más si son cartas, solo por imaginar la cara cuando las reciban
2) Tomarme una rica taza de café por las mañanas
3) Platicar con mis amigos en el medio que más se nos acomode.
4) Soñar, de preferencia despierta
5) Leer, aunque en veces el tiempo no me de.
6) Pensar en 2 personas importantes en mi vida, presente y futuro.

martes, noviembre 18, 2008

Retazos

Photobucket



La vida esta hecha de momentos, de esos buenos, los malos, los regulares, los tristes, los rebosantes. La vida en si nunca es monótona, no contiene los mismos matices, tonos. La vida está hecha de retazos.


Y parecieramos un rompecabezas, lleno de colores, con sus sombras y su luz, que de lejos pareciéramos una imagen fiel, pero si te acercas y conoces lo suficiente verás cada pieza y lo que está detrás. En el negro del cabello se han resguardado tantas sombras que envuelven la cabeza y hay zonas donde brilla más, otras por las que el tiempo les ha quitado el color, es una capa que pretende proteger pero que se debilita un poco cada día.



En la piel están las marcas de todo lo que sucede en la vida, de los días de sol, las grietas del frío que cala, la humedad, la suavidad, incluso los olores dulces que revuelven la memoria. en la piel se han quedado las huellas de todo lo que ha pasado, incluso el tiempo, como si tuviera una pequeña leyenda cada trozo, en la que guarda "ese" instante.


Tantas alegrías que conforman la sonrisa y cuando son demasiadas se acumulan en pequeños zurcos alrededor de los ojos, que podrán no ser de lo más estéticos, pero ayudan a dar luz. Luz en todo el rostro, pero en especial, de un tiempo a esta parte un brillo especial que se ha posado en los ojos que destella cuando se encuentra algún momento que evoque las letras de su nombre.

sábado, noviembre 01, 2008

Pensando en ella

Ella y él se tenían el más puro amor y no lo comprendían hasta aquella tarde que cambiaría radicalmente lo que sería de cada quién.

Ella siempre tan paciente, tan linda, tan tranquila, él impulsivo, loco, que no se está en paz. No es que fueran de mundos diferentes, sino que tenían una pequeña edad que perdonar. Ella lo quería con toda el alma, él la quería pero no se daba cuenta a cual extremo. Se pasaban los días entre risas, llantos, una pelea, silencios.

Esa tarde ella y él discutieron, ella agarró su automóvil y se fue por la carretera sin un rumbo fijo, solo pensando en él, en los momentos felices a su lado, imaginando el futuro que podrían tener estando juntos. Ella solo manejaba para despejar su mente, para tratar de comprender el comportamiento de él, para recapitular lo mucho que lo queria, para buscar a un porque a su última molestia.

Él, impulsivo como siempre, se había ido sin avisar, pero como en todas las ocasiones anteriores, el tiempo y la mente que comenzaba a dar vueltas lo hizo reconsiderar y optó por llamarle. Se quedaron de ver en un lugar, cada quién iría en su respectivo auto, y se encontrarían en un lugar, a una hora determinada.

Él llego, la estuvo esperando, pasaron los minutos, más y más, él comenzaba a desesperarse, ella no era impuntual. Los minutos volaron, las horas pasaron y se comenzó a molestar. Decidió partir, iba rumbo a su casa, cuando un accidente en la carretera lo obligo a bajar la velocidad, no pudo evitar dar un vistazo a lo que había pasado. En su mente pasaban las imágenes y al final las asoció, él conocia ese coche.

Se detuvo de golpe, corrió deseando que sus sospechas fueran falsas, un espejismo, un reflejo nublado de la mente. Entonces la vió, ellá estaba ahí con su último aliento, lo estaba esperando a él. Él se acercó, se dijeron unas palabras al oido, las lágrimas rodaron por las mejillas y en su ultimo aliento, ella lo amo.

Ahora ella se ha convertido en su ángel guardián, él habla con ella cada noche, se encuentran en sus sueños, mantiene vivo su recuerdo y le ama como el primer día. Ella es todo para él, su angel, su guia, su compañera, su amor. Él espera reunirse con ella, le cuenta sus cosas y en una ráfaga divina, ella le besa la frente y los ojos y le ayuda a descansa.

Ella y él saben que el amor no tiene final.