Quien iba a creer que se pudiera ser taaan feliz, que una sonrisa se tatuara y fuera tan contagiosa como el virus de la viruela, que no es necesario que te toquen para contagiarla que con solo te miren y se dibuje una sonrisa en sus labios aumentando así la fuerza y el tamaño de la propia.
La felicidad es un bien alcanzable, es un bien que nace desde dentro, nosotros la cultivamos y los que nos rodean la riegan, con sus gotitas de miel que en ocasiones parecieran lluvias torrenciales que embellecen el paisaje.
Soy feliz y mi vista interior es la mas sana que había visto en años.
Les dejo una sonrisa que perdure y que les robe 1000 mas...
miércoles, noviembre 24, 2004
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