Es cuestión de lejanías... todas las tristezas y nostalgias en mi vida es cuestión de lejanías, de escuchar voces a través del teléfono, de imaginar caras, sonrisas, abrazos. Es la distancia que me separa que me mantiene oculta, distancias de metros, kilómetros, es quizá solo un momento, unos instantes donde las defensas de mi cuerpo han bajado, donde siento que soy vulnerable a todo. Puede que esto sea para recargar energías o un aviso de que necesito renovarme, que necesito redefinir mis prioridades e intentar no extrañar, al menos no de la forma en que he extrañado en los últimos días. Hay momentos en que me quisiera tomar un carro, no se, el que sea, o un taxi, un camión, lo que sea que me ayude a reducir las distancias, pero entonces recuerdo sus palabras, sus analogías y cuando estoy a punto de hacerlo, cuando me encuentro más decidida en mi cabeza retumban las palabras...

ToYoTeRo...
eske a veces no se trata de k alguien fallo, sino de ke kuando no es el 6 pal 8 ni pake moverle
Seré yo el 6 y él el 8?? qué tanto son dos números de diferencia?? Acaso solo los 6 pueden estar juntos?? y el 7 que se atraviesa y no me deja estar de perdido a un lado suyo.. Quién repartió los boletos?? porqué no me preguntaron que número era el que yo quería???? Acaso alguien quiere cambiar conmigo su número??? Por favor me gustaría ser un 8.
Pero también me pongo a pensar que si soy un 6 es por algo, que si existe una lejanía es por algo, ya no está tan lejos como antes, pero ahora lo veo más inalcanzable, más lejano, tan lejano que las estrellas tardan mucho en traerme noticias suyas. Entonces de que sirve ya tomar un carro si por cada kilómetro que avance el estará dos más allá. Acaso eso quiere decir que debo cambiar mi ruta??
Lo único que se es que ya no quiero lejanías, las lejanías son causantes de muchas tristezas, aunque esas mismas lejanías te ayudan a pensar, a valorar y a atesorar más eso que tienes en la distancia, a recargarte de energía y tener la iniciativa de reducir distancias, tomar lo que sea para llegar, un autobus, un carro, un avión, una bici, un aventón, lo que sea para llegar, para un reencuentro, para ya no imaginar lo que será, para convertirlo en un es y que muy dentro del corazón siempre perdurará.