Hay algo extraño en los miércoles, que en un solo momento pasan todos los días de la semana y como bien a media semana y a medio día, es que me despejo un poco de lo que tengo que hacer y vengo a refugiarme aquí. Con tantas cosas que pasan, con tantas ideas locas y con muchos sueños por realizar, tomo mi lapicero y dejo que hable esa parte que siempre anda viajando con las estrellas.
Aquí dejo esto no solo por ser miércoles, sino por las ganas que parezca viernes...
Del santo Evangelio según san Marcos 13, 24-32
Hace 8 horas.
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