miércoles, agosto 12, 2009

Memorias...










Una noche clara después de una tormenta, vamos llegando... mojados... recargados de risa, palabras, gritos... todo lo que se pudiera querer de fuera de esa recamara ya está satisfecho... Maui se salió a mirar la luna y estamos solos los dos, con tu selección de música tenue, solo para que el frío de la ciudad no se cuele bajo la puerta.

Te quitas tu camisa empapada, yo jugueteo con tu cabello pretendiendo secarlo...te acercas despacio y me abrazas por la espalda, haces el cabello a un lado y besas mi cuello, despacito, como si quisieras hacer el momento eterno, mi piel se eriza y no se bien si es por lo húmedo de la ropa o por todo lo que ese acercamiento mueve en mi.

Con un ágil movimiento desabrochas el pantalón y cae víctima de la gravedad, yo doy la vuelta y nos encontramos así, frente a frente, puedo mirarme en tus ojos, con mis manos delineo tu cara, siento tu piel, me aseguro que no es alguno de mis sueños.

Despacio me despojas de la blusa, no hay prisa, ya no se siente frío pero aún así comienzo a temblar. Tu adviertes mis sensaciones y con las manos recorres la espalda, la cintura, las caderas. Quedarán recuerdos de los besos en el cuello, mejillas, ojos, frente. Hay un ataque de nervios, pero algo en mi sabe que será especial. Los nervios se desvanecen cada vez que besas el cuello, pues descubres que justo ahí es donde la resistencia se esfuma...

Mis manos recorren tu espalda, tus brazos, apoyo mi cabeza en tu pecho para escuchar como se aceleran los latidos de tu corazón. Al fin me animo, me acerco a tu oído pretendiendo decirte algo y beso tu oreja y hago un camino que te recorre desde ahí... entreteníéndome en tu cuello, pasando por tu pecho, tu estómago...las últimas prendas caen, no importa en que momento mi contemplación y reconocimiento es mayor...

Nos fundimos en un abrazo, cada poro pretende guardar en su memoria el roce con tu piel, el calor que despides, cada movimiento, cada caricia... y el tiempo se detiene, queda suspendido en la memoria, en esos recuerdos que te hacen volver a sentir, los que viene n y revuelven todo dentro... cuando pienso en ti